jueves, 25 de septiembre de 2008

MORE SEPTEMBER...

Se nos va consumiendo el mes de septiembre y hace días que amanece más tarde y anochece más temprano. La luz del sol pierde fuerza y aquí ya revolotea el cierzo, al que no creo que consiga acostumbrarme jamás. No nos queda ni la alegría de la Expo, porque acabó hace casi dos semanas.
¡Mas madera... es el otoño!
A mí antes me entristecía el paso del verano al otoño. Pero últimamente he descubierto que hasta la leve melancolía que me suele azotar estos días tiene su belleza. Y que las tardes de otoño nubladas y algo tristes son ideales para sentarse en el sofá (cuando se tiene tiempo) y escuchar música de esa que nos entra por el oído y se instala dentro del pecho para hacerlo vibrar.
Hoy he localizado otra canción que habla de septiembre: September in the Rain, cantada por el vozarrón de Dinah Washington sin el acompañamiento de violines y coros a lo consultorio de Elena Francis que le ponían a la pobre en algunas grabaciones (¡que algún técnico de sonido bondadoso se apiade, please, y las elimine haciendo uso de los adelantos técnicos de hoy en dia!).




Y para comparar, una curiosidad que he encontrado en YouTube: la misma canción interpretada por los Beatles. Confieso que ni sabía que la habían grabado los chicos de Liverpool. Debió de ser al principio de los tiempos.



5 comentarios:

La Perra de Kenia dijo...

No está mal este cambio de estación. Recuerdo que cuando vivía en Dénia , era más cómodo porque estaba al lado de la playa, con largos paseos por las tardes y todo se veía mejor...hasta la gota fría!
Un beso
Feliz fin de semana
Roben

Carmen Santos dijo...

Es que en Dénia, al ladito del mar, se debe de estar bien hasta en invierno.
Buen finde ti también.

Miguel Ángel Yusta. dijo...

Es cierto: en otoño todos morimos un poco.Yo lo llevo especialmente mal. Pero llegará (esperemos)una nueva primavera...Besos

Carmen Santos dijo...

Hola Miguel Ángel. Es que la primavera se lleva mejor. Pero, bueno, el otoño también tiene su belleza, aunque cueste más adaptarse a él.
Besos

Anónimo dijo...

Vaya, pues ya veis: yo no soporto la primavera, con ese revoltijo de pólenes y apareamientos salvajes, chubascos, ventoleras, fríos ,calores y alergias.El otoño, en cambio, es mi estación favorita, creo que tiene mucha más clase...ese sol tan dulce, esos tonos incomparables en el bosque, esa placidez en la naturaleza, esa mansedumbre...Incluso ese punto nostálgico tiene su gracia
Besitoss
Pepa