miércoles, 23 de septiembre de 2009

A PROPÓSITO DE SAN PHOTOSHOP

He leído hoy en El Mundo digital que en Francia han propuesto una ley “para luchar contra lo que consideran una imagen deformada del cuerpo de las mujeres”. La parlamentaria Valérie Boyer y otros cincuenta compañeros de armas han presentado una propuesta de ley para que en el futuro, cuando se publiquen en cualquier medio fotos alteradas por la varita mágica de San Photoshop, éstas lleven una advertencia que diga: “Fotografía retocada para modificar la apariencia física de una persona”. Y lo primero que me viene a la cabeza es: ¿Merece algo tan frívolo como el Photoshop que se le dedique una ley que regule su utilización?

A priori, a mí el Photoshop no me parece tan terrible. Al menos, si se aplica con mesura. Cuando me decido a ir hacerme una foto de estudio con miras a la solapa de un libro, siempre agradezco que el fotógrafo, un chaval muy profesional y motivado, le pase un poquito de Photoshop al resultado final. No me quita veinte años, ni siquiera dos; tampoco me convierte en alguien que no soy, pero la fotografía luce más bonita y el libro lo agradece.

Claro, otra cosa son esas fotos más que retocadas que publican algunas revistas del “corassón”, en las que señoras a punto de traspasar el umbral de la tercera edad lucen más jóvenes que sus hijas veinteañeras, o donde la criatura más voluminosa del mundo acaba convertida en una etérea sílfide y las que ya son guapas parecen diosas recién bajadas del Olimpo. Pero no creo que a estas alturas nos engañen con esos retoques. Siempre seguiremos debatiendo, con mucha maldad, dicho sea de paso, si la Barbie de turno es así o la han pasado por el Photoshop. Y seguiremos concluyendo que la han pasado por el Photoshop, pero además a lo bestia.

Esta historia de avisar que las fotos han sido retocadas me recuerda a las advertencias apocalípticas que adornan los paquetes de cigarrillos. Esas que dicen que fumar es perjudicial para la salud y amenazan al fumador con mil enfermedades y una muerte terrible. Pero los fabricantes siguen produciendo tabaco y vendiéndoselo a los fumadores. El negocio es el negocio. Eso sí: ¿y lo bien que quedan las cajetillas con esos avisos? ¿Y lo limpia que tienen la conciencia los que discurrieron esa medida? Y además, sin despeinarse ni un pelo, porque siempre es más fácil detenerse en la superficie que meterse en honduras. Pues igual de a gusto se van a quedar los promotores de esta ley para regular el uso del Photoshop, si es que prospera. No servirá para nada, y las que convierten esos cuerpos tuneados en ejemplos a seguir, lo harán igual que antes. Pero los artífices de la ley quedarán como reyes.

Y seguro que una ley tan lucidora llegará tarde o temprano a España. Pero que sepan que aquí los de a pie, o las de a pie, porque las mujeres somos más malas para estas cosas, seguiremos afirmando en las conversaciones, sin necesidad de que las fotografías vengan acompañadas de advertencias superfluas, que fulana o mengana ha sido retocada con Photoshop porque al natural es un adefesio de lo peorcito. Y nos sentiremos reconfortadas en nuestra infinita maldad. Porque cuando pensamos que los ricos y famosos y guapos también tienen sus miserias, las nuestras se vuelven más llevaderas.


8 comentarios:

carmen dijo...

Etiquetado perfectamente este post.
Frivolidades.Hace falta ser inútiles para perder el tiempo en semejante chorrada.Advertir que la foto está retocada con Photoshop.Se deben de aburrir bastante estos parlamentarios Franceses........
Saludicos.

39escalones dijo...

Yo creo que tras esto hay algo mucho más serio: que la manipulación fotográfica se utilice para otras cosas no tan frívolas, como documentos gráficos en prensa, en pruebas judiciales, etc., etc. Es decir, que una cosa es tapar arrugas o michelines, y otra muy distinta la confección o manipulación de imágenes que puedan servir a intereses nada claros. Convertir eso en delito no me parece nada mal.
Saludos.

Carmen Santos dijo...

Carmen: Ellos lo hacen con el argumento de que esas fotos retocadas fomentan la pérdida de la autoestima en quien las ve y pueden provocar a la larga trastornos alimenticios. Lo malo es que esos problemas no se erradican poniendo una advertencia junto a las fotos. Yo lo veo como un gesto de cara a la galería, que siempre resulta más fácil que meterse de lleno en los problemas.
Saludicos

Carmen Santos dijo...

39escalones: Hombre, en los ejemplos que das estaría bien que se considerara delito la manipulación de fotografías.
Pero por lo que da a entender este artículo (y otros que he repasado), esta gente se refiere a la utilización de fotos retocadas en la publicidad y en el mundo de la moda. Y si lo que pretenden es acabar con la manipulación a la que nos someten a las mujeres de cualquier edad (y cada vez a más hombres) para vendernos un ideal de belleza absurdo y muchos potingues, no creo que lo vayan a conseguir colocando una advertencia junto a las fotos tuneadas. Para eso hace falta meterse en harina de verdad, no limitarse a colocar junto a las fotografías una advertencia que nadie leerá. Eso sólo sirve para aparentar que hacen algo.
Saludos

Pepa dijo...

A mí me encantaban las fotos que hacía Lord Snowdon, que sacaba guapísimos a la familia real británica (¡...!)
...Y entonces no había Photoshop
Quiero decir, que los fotógrafos toda la vida han retocado las fotos, o, simplemente, han sabido sacar el lado bueno...
Besos
Pepa

Carmen Santos dijo...

Desde luego, Pepa. Los fotógrafos buenos siempre se han preocupado de sacar bien a sus retratados y han retocado las fotos con los medios de los que disponían en cada época. A todo el mundo le gusta salir favorecido cuando se deja retratar.
Por cierto, un artistazo ese Lord Snowdon, porque para sacar guapos a algunos miembros de la familia real británica...
Besos

Celia Santos dijo...

pues más de una y de uno se dajará pillar en top less si en el contrato pone que le den una pasadita por el photoshop

Carmen Santos dijo...

Ja,ja. Seguro que negociarán que les "roben" fotos en bañador, pero siempre sometiéndolas a un posterior tratamiento con Photoshop. A saber cuántas de esas fotos "robadas" que publican por ahí han sido retocadas. Seguro que habrá la tira.
Besos