Estos días he andado liadilla y he tenido el blog algo abandonado. No se puede estar en todo. Pero a pesar de lo mucho que he corrido de un lado a otro y de las deprimentes lluvias de los últimos días, es imposible no observar que los árboles se han llenado de hojas que los visten de un verde luminoso. Parece que la primavera por fin llega de verdad, no sólo en el calendario o en forma de alergias. Y para darle la bienvenida, he buscado en YouTube un delicioso fado: Primavera.
Con el fado me ocurre lo mismo que con el bolero: no es el tipo de música que me guste escuchar a todas horas, pero hay momentos y estados de ánimo que me predisponen a disfrutar de un fado que evoque las calles de Lisboa, o de un bolero cantado con voz rota por el desamor (los interpretados por cantantes melosos y engolados me empalagan).
Pero hoy toca fado. El fado Primavera. Primero cantado por Mariza en vivo junto a la Torre de Belém:
Con el fado me ocurre lo mismo que con el bolero: no es el tipo de música que me guste escuchar a todas horas, pero hay momentos y estados de ánimo que me predisponen a disfrutar de un fado que evoque las calles de Lisboa, o de un bolero cantado con voz rota por el desamor (los interpretados por cantantes melosos y engolados me empalagan).
Pero hoy toca fado. El fado Primavera. Primero cantado por Mariza en vivo junto a la Torre de Belém:
Y también la versión más clásica de Amalia Rodrigues:
8 comentarios:
Mmmmm qué hermosa voz la de Amalia...A mí, ya ves, no me hacen gracia los fados. Debe influir que no les entiendo la letra, que es lo que más me atrae de los boleros y de los tangos...pero Amalia Rodrigues es un regalo.
Y para dar la nota discordante, te diré que odio la primavera, que a todos gusta tanto. No soporto las alergias, los insectos, el revoltijo de temperaturas, de lluvias, fríos, calores...y los trancazos consiguientes, como el que llevo encima. No me gusta esa ebullición desordenada de la Naturaleza, ese florecer de los árboles como locos, para luego malograrse los frutos con las heladas...
No me va nada estar constantemente sacando y metiendo el abrigo del armario...
No aguanto las tiendas llenas de ropa ligera y de colorines, mientras contemplamos helados el escaparate...Brrr ¿se nota que estoy baja de ánimo?
Besos
Pepa
Uy, uy, uy, ¡qué declaración más anti-primavera!
Confieso que a mi estos últimos días de cambios extremos de temperatura y lluvias a destiempo también me han afectado negativamente. Es la parte mala de la primavera. Y este año ha sido especialmente dura. A lo mejor por eso sentí tanta alegría al darme cuenta de cómo, casi de un día para otro, han florecido los árboles, llenándose algunos de hojas verdes y otros de florecitas blancas o rosas. Esa parte de la primavera me parece un milagro y siempre la disfruto.
En cuanto a las tiendas, es que se pasan un montón, exponiendo la moda de primavera casi desde febrero. Un poco de por favor, señores comerciantes...
Besos
Ja, ja. Bueno, como hoy estoy de mejor humor, y no hace mal día, te sugiero un paseíto por la ribera del Ebro, de la pasarela peatonal al Puente de Santiago, y tomarte un vermoutillo en el "garito" de la arboleda de Macanaz, con vistas al Pilar chachi piruli...
Besos
Pepa
Carmen,a mi me pasa lo mismo que a ti.Cuando huelo la primavera,me cambia el ánimo.Me encanta ver los brotes de los árboles,las margaritas en el césped.La primavera es vida nueva en todo su esplendor.Yo nací llegando la primavera,y cada año vuelvo a nacer con ella.Los fados,preciosos.El de Mariza,para mi ,sublime.Saludicos Primaverales
Pepa: Gracias por la sugerencia. Para este fin de semana ya se me ha hecho un poco tarde, pero tomo nota para otro. Pinta muy bien ese paseíto.
Besos
Carmen: Es que anima mucho ver renacer la vegetación, sobre todo después de un invierno tan frío como este último.
Yo también nací de cara a la primavera.
Besos
También tengo que reconocer que la primavera no es santo de mi devoción, el polen y las alergias me cargan un poco y coincido en lo de 'ya es primavera en el corte inglés', cargándose como siempre la estación presente y anticipándose con ello a lo que no pega ni con cola, (ello conlleva por cierto otro nuevo gesto hacia la impaciencia para nuestros difíciles días). Será que depende en qué época naces te sientes más afín??? sé que pocos lo entienden, pero a mí me encanta el invierno. No lo veo triste sino nostálgico y cálido. Sí, soy de diciembre, del día de la suerte.
besos.
También tengo que reconocer que la primavera no es santo de mi devoción, el polen y las alergias me cargan un poco y coincido en lo de 'ya es primavera en el corte inglés', cargándose como siempre la estación presente y anticipándose con ello a lo que no pega ni con cola, (ello conlleva por cierto otro nuevo gesto hacia la impaciencia para nuestros difíciles días). Será que depende en qué época naces te sientes más afín??? sé que pocos lo entienden, pero a mí me encanta el invierno. No lo veo triste sino nostálgico y cálido. Sí, soy de diciembre, del día de la suerte.
besos.
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